¿Alguna vez has visto a un camarero haciendo malabares con botellas? Eso es Working Flair, un arte de coctelería. Combina acrobacias con la creación de bebidas atractivas.
El Working Flair es una disciplina dinámica que combina la precisión en la preparación de cócteles con habilidades acrobáticas, proporcionando una experiencia de bar única y entretenida.
Nació en los años 80 en Estados Unidos. Los camareros buscaban formas creativas de destacar. Empezó como una tendencia en Las Vegas y se convirtió en un fenómeno global. Ahora, bares y restaurantes de todo el mundo ofrecen espectáculos de Working Flair.
Hoy, es más que una tendencia, es un arte respetado en la coctelería y se celebran competiciones internacionales cada año. Tony Abou-Ganim, Yann Leboucher y Jeffrey Morgenthaler son algunos de los nombres más famosos en este campo. Por tanto, este arte es más que un espectáculo. Es una forma de interactuar con los clientes y crear una experiencia memorable. Si quieres mejorar tus habilidades de coctelería y ofrecer algo más que un cóctel, el Working Flair es la opción.
Ofrecemos la oportunidad perfecta de aprender esta disciplina con el Curso Working Flair de un mes de duración en Escuela de Coctelería de Madrid para aquellos interesados. La próxima vez que veas a un camarero haciendo malabares, sabrás que estás presenciando arte. Tal vez te inspire a aprender coctelería acrobática.
Esta técnica de coctelería no solo es entretenimiento, también requiere habilidad y precisión.
Los bartenders deben tener un conocimiento profundo de las bebidas que están preparando, así como de las técnicas de mezcla y presentación. Además, deben ser capaces de realizar sus acrobacias sin derramar una gota, lo que requiere una gran coordinación y control.
La seguridad es otra consideración importante en esta disciplina. Los bartenders a menudo trabajan con botellas de vidrio y herramientas afiladas, y un error puede resultar en lesiones. Por lo tanto, es esencial que reciban una formación adecuada y siempre prioricen la seguridad.
Esta técnica también puede ser una excelente herramienta de marketing para bares y restaurantes. Un buen espectáculo puede atraer a multitudes y generar publicidad, lo que puede aumentar las ventas y la popularidad de un establecimiento.
Además de los espectáculos en vivo, esta disciplina también ha encontrado un lugar en la televisión y el cine. Películas como “Cocktail” protagonizada por Tom Cruise han ayudado a popularizarla y a inspirar a una nueva generación de bartenders.
Finalmente, esta técnica es una forma de expresión artística. Al igual que un bailarín o un músico, un bartender utiliza su habilidad y creatividad para crear algo hermoso y emocionante. Cada rutina es única y refleja la personalidad y el estilo del bartender.
En resumen, esta disciplina es fascinante, combinando habilidad, creatividad, entretenimiento y arte. Ya sea que estés interesado en aprenderla o simplemente disfrutar de un buen espectáculo, hay algo en ella para todos.
